Costes y precios de la extinción de condominio

Extinguir un condominio en España implica afrontar varios costes, desde honorarios notariales hasta impuestos y tasas de registro. Tener claridad sobre estos gastos es clave para planificar adecuadamente y evitar imprevistos.

A lo largo de este artículo, encontrarás un desglose de los principales costes que intervienen en el proceso, lo que te permitirá estimar mejor el presupuesto necesario para llevar a cabo la extinción de un condominio en España.

En primer lugar, te hablamos de los costes de Notaría, entre los cuales nos encontramos con:

Toda extinción de condominio, o más bien la nueva titularidad sobre los bienes que anteriormente se hallaban en comunidad de bienes, debe ser formalizada mediante escritura pública ante notario.

El coste de este trámite dependerá del valor del bien en cuestión, así como de la complejidad de dicho documento; suele oscilar entre un 0’2 y un 0’5 del valor cedido. Y deberá abonar su valor el adjudicatario del bien.

Además del propio documento, deberemos abonar los honorarios del notario, que están regulados por ley (concretamente por el Número 2 del Anexo I del Real Decreto 1426/1989, de 17 de noviembre, por el que se aprueba el Arancel de los Notarios) y pueden variar en función de la comunidad autónoma en que nos hallemos.

Los costes registrales son una parte esencial en el proceso de extinción de condominio, ya que la propiedad debe actualizarse en el Registro de la Propiedad una vez completado el trámite.

Estos gastos incluyen la inscripción oficial de la escritura y otros trámites necesarios para formalizar la disolución de la copropiedad.

También nos vamos a encontrar con los costes de inscripción en el Registro de la propiedad, pues, resulta obligatorio inscribir la nueva titularidad del bien. Estos costes dependerán del valor del inmueble y de la normativa vigente. Por lo general, la tarifa mínima son 24 euros, y pueden alcanzar hasta una máxima de 2.181,67 euros.

Otro de los grandes costes en la extinción de un condominio son los impuestos que deben liquidarse ante Hacienda de España.

Estos tributos varían según el tipo de propiedad y la situación de los copropietarios, y son fundamentales para formalizar el proceso ante las autoridades fiscales.

El pago en el IRPF corresponderá al adjudicatario, pues deberá declarar una ganancia patrimonial y tributar lo pertinente por la misma. Por supuesto, esto únicamente ocurrirá si, al extinguir la comunidad, el valor del inmueble es superior al valor de adquisición del mismo.

Debe hacerse frente a este impuesto en la mayoría de las extinciones de condominio, pero cabe matizar que no tributaremos por Transmisión Patrimonial Onerosa, pues no estamos vendiendo voluntariamente sino transmitiendo un bien que resulta indivisible para extinguir la comunidad sobre el mismo; sin embargo, sí estarán sujetos a los Actos Jurídicos Documentados los comuneros que reciban el bien.

El importe por AJD varía según la comunidad autónoma en la que nos encontremos; el tipo impositivo puede oscilar entre el 0,5% y el 1,5% del valor adjudicado.

La duda frecuente es si en una extinción de comunidad de bienes debe pagarse el Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana. La respuesta es que el adjudicatario NO está obligado a afrontar este impuesto local.

Esto se debe a que, en este caso, no se considera una compraventa ni una transmisión de bienes. Al tratarse de un copropietario que indemniza a los demás a cambio de la titularidad completa, se entiende que ya poseía el bien, aunque lo compartiera hasta la extinción. Por tanto, no se cumple el hecho imponible necesario para aplicar el impuesto.

Un aspecto importante en la extinción de un condominio es el coste de la tasación del bien. Este gasto es fundamental, ya que una tasación profesional determina el valor real de la propiedad, ayudando a calcular la compensación justa que debe recibir cada copropietario.

En la mayoría de los casos, se recurre a un perito o tasador cualificado para garantizar una valoración imparcial y precisa del inmueble. Dividir el valor de forma justa es esencial para evitar conflictos, y aquí es donde la tasación se convierte en un paso clave del proceso.

Algo fundamental ante la extinción de un condominio para evitar que haya malentendidos y que todas las partes queden satisfechas, es llevar a cabo una tasación del inmueble para obtener su valor de mercado actualizado.

Para ello deberemos contratar a un tasador profesional cuyos honorarios suelen oscilar entre poco menos de 200 euros y los 550/600 euros, todo ello dependiendo del tipo de inmueble y de la ubicación del mismo.

La tasación correrá a cargo de el interesado, o los interesados, en que esta se lleve a cabo.

Para la extinción de condominio por vía judicial, será indispensable contratar los servicios de un abogado para asesorar y representar a los copropietarios en el proceso y, en consecuencia, se deberá hacer frente al coste de los honorarios del mismo.

Dichos honorarios puede variar ampliamente en función de la complejidad del caso y la reputación del abogado, pero lo más común es que oscilen entre los 500 euros y los 1.500 euros.

Aparte de los ya mencionados, también hay otro tipo de gastos a los que quizá debamos enfrentarnos durante una extinción de condominio, son:

Son los costes derivados de la gestión de documentos, copias, y otros trámites administrativos. Van relacionados con los gastos notariales de los que ya hemos hecho mención al principio.

Tan solo habría que hacer frente a estos costes en caso de recurrir a la mediación para resolver los conflictos ocasionados entre los condueños; dichos costes suelen ir de los 600 a los 1200€ de media.

Te comparto un cálculo aproximado de los gastos que podrías enfrentar en el proceso de extinción de condominio. Es importante recordar que estos costes pueden variar según la ubicación, los honorarios de los profesionales y otros factores específicos de cada situación.

Como profesionales en extinciones de condominios, nuestras recomendaciones groso modo son las siguientes:

• Obtención de presupuesto: Es imprescindible obtener varios presupuestos de diferentes profesionales y entidades para poder comparar los costes y servicios, y poder así optar por la opción que más nos convenga.
• Asesoramiento profesional: Ante todo, se debe contar con el apoyo de abogados, notarios y otros profesionales especializados para garantizar que el proceso se lleva a cabo de manera justa y acorde a la normativa vigente.